La noche del 16/05 se realizó un nuevo ataque al restaurante tailandés Malai de Gotemburgo en Suecia para que dejen de vender sopa de aleta de tiburón. Se volvieron a romper las ventanas del local a martillazos (las cuales habían sido rotas unos días atrás) y también la puerta de entrada. La acción se realizó con facilidad y con rapidez, incluso se cruzaron con un patrullero que se dirigía hacia el lugar cuando ellos ya se retiraban. Anteriormente también hubo pintadas en el frente con el mensaje “no vendan sopa de aletas de tiburón” y se arrojó pintura color rojo sangre.
Para elaborar la sopa de aleta de tiburón se cortan las aletas de los tiburones aún con vida y se los devuelve al mar en el cual se ahogan dolorosamente. Pero debido a los continuos ataques realizados, el restaurante ha decidido sacar el plato del menú.
Escribieron en el comunicado: “Gotemburgo será una ciudad libre de maltrato animal y cualquier persona que se interponga en el camino puede contar con nuestra visita”
Frente de Liberación Animal, Suecia.