De la prensa: Las protestas por el desalojo de una casa ocupada en Berlín, que desde este miércoles dejaron decenas de heridos y detenidos, se contagiaron hoy a otras ciudades de Alemania, donde grupos anarquistas y de extrema izquierda protagonizaron disturbios.
El jefe de policía de la capital alemana, Dieter Glietsch, señaló hoy que 61 agentes resultaron heridos y que 82 personas fueron detenidas durante el desalojo del miércoles en el barrio de Friedrichshain, en el este de Berlín, y durante los disturbios que siguieron a lo largo de toda la noche.
Glietsch habló de grupos que, «en un brote de violencia ciega», recorrieron las calles de Berlín hasta la madrugada de hoy rompiendo escaparates y dañando paradas de autobús, coches y edificios.
De los nueve ocupantes de la vivienda detenidos durante el desalojo, cuatro son alemanes, tres italianos, uno español y otra francesa.
El movimiento de apoyo a la casa ocupada se contagió hoy a otras ciudades del país. En Hamburgo, una marcha de protesta pacífica con unos 470 participantes terminó con un grupo de agitadores lanzando botellas y piedras a los alrededor de 250 policías que vigilaban la manifestación. Cuatro agentes resultaron heridos.
Escenas parecidas se vivieron en Kiel, donde unos 20 manifestantes provocaron desmanes en el centro de la ciudad, lanzaron pirotecnia y mancharon fachadas con pintura de colores. También en Osnabrück y Dortmund hubo enfrentamientos entre encapuchados y la policía.