Liberaron a las 13 personas detenidas por atacar un edifico tras la muerte de Sofía VialeEl día que se conoció la noticia del fallecimiento de la niña de 12 años, un grupo de personas manifestó su indignación contra el edificio judicial de General Pico. Lo apedrearon y quemaron en parte. Les habían dado 30 días de arresto. La decisión de liberar a las 13 personas fue tomada por el juez de Control, Diego Ambrogetti, a solicitud del representante del ministerio público, el fiscal Oscar Blanco.Permanecieron detenidos 12 de los 30 días de prisión preventiva que le había adjudicado el mismo juez que le otorgó la libertad.Al parecer la fiscalía no habría contado con suficientes pruebas para mantener detenidos a los acusados. La medida se efectivizó el día martes a las 19:30.Fuente: Infopico.com
hubo tiros, incendios y heridos
Una suerte de pueblada reaccionó tras el hallazgo del cadáver de Sofía. Hubo hechos de violencia cerca de la medianoche.
General Pico (Agencia) – Hasta la madrugada se registraron gravísimos incidentes en inmediaciones de la vivienda donde hallaron el cuerpo de Sofía. La gente se enfrentó con la policía frente a la casa de barrio, luego se fue hasta la Comisaría Cuarta donde incendiaron una Renault Traffic y trataron de tomar la dependencia policial, y a partir de allí, la policía reprimió con postas de goma y también escucharon detonaciones de arma de fuego. En el Hospital ingresó un policía herido en la cabeza, mientras que algunos otros heridos fueron a Clínicas privadas. A la madrugada lincharon al jefe de fiscales, Carlos Salinas.
Hasta pasadas las 18 horas alrededor de 150 personas aguardaban, casi a modo de curiosidad, detrás de las fajas de seguridad que la policía dispuso en la cuadra donde hallaron el cuerpo de Sofía. Hasta que los primeros medios de comunicación comenzaron a difundir la noticia, y a partir de allí, comenzó la furia.
Uno de los tres policías que custodiaban la calle 40 y 29 sirvió como detonante para que la gente desborde los controles. En vez de contener, tuvo una actitud “de guapo” y allí los vecinos embistieron y llegaron hasta el frente de la vivienda, en cuyo interior había fiscales, jefes policiales, personal de Criminalística y los forenses.
Ya esa altura el número de manifestantes superaban las 400 personas. Varias trataron de ingresar a la casa, para linchar al violador que allí no estaba. Rompieron un canasto de basura con el que enfrentaron a la policía y también destruyeron la camioneta del médico forense Graciano Masso, que la había estacionado frente al domicilio.
En medio de la refriega volaron pedazos de ladrillos, piedras y palos. Uno de los objetos arrojados por la gente dio en la cabeza del comisario Valenti, que se desvaneció y debió ser trasladado al hospital Centeno.
Los padres de la niña que ayer quisieron abusar pidieron que la gente “no se rinda” y continúa reclamando. Minutos más tarde subió a la misma casilla de gas el padre de Sofía, para pedir que la gente se retire y deje trabajar a la policía, pero recibió insultos, acusaciones de “violín” y lo golpearon cuando bajó.
Cuando corrió el rumor que la mujer del violador estaba en la Comisaría Cuarta, cientos de vecinos encararan hasta el lugar, a dos cuadras y media de la casa de barrio. Allí dieron vuelta una Renault Trafic y la prendieron fuego. En ese lugar comenzó la represión policial que se extendió hasta el cierre de esta edición.
Cientos de jóvenes, vale decir muchos de ellos quizás no movilizados por el caso Sofía, se enfrentaron con los uniformados que dispararon centenares de balas de gomas, pero también se escucharon detonaciones de armas de fuego. Pasadas las 23 horas la policía arrojo gases lacrimógenos, pero ni eso calmó los ánimos.
Decenas de jóvenes mostraron horas más tarde las heridas de las postas de goma, aunque desde el Hospital se mencionó que –hasta cerca de la medianoche- no habían ingresado heridos civiles.
Mientras tanto, una manifestación pacífica de alrededor de 200 personas se concentró frente al Palacio de Tribunales, que reclamaba por justicia y la renuncia de los investigadores. Hasta ese lugar llegó el intendente Juan José Rainone, que se rodeó del grupo de autoconvocados por la seguridad, para hacer escuchar su mensaje. Mientras una parte de los presentes escuchó, otros lo abuchearon y le reclamaron la cabeza de funcionarios judiciales y policiales.
Mientras tanto los tiros continuaban en el barrio Ranqueles y la policía comenzaba a utilizas gases para dispersar a decenas de jóvenes que rodeaban la manzana. Algunos decidieron abandonar los enfrentamientos, para sumarse a la manifestación de Tribunales.
Mientras varios presentes proponían ir a buscar a los funcionarios judiciales a sus casas, la columna inició su marcha hacia la plaza y luego el centro de la ciudad, done el destino –o el poco sentido común del involucrado- les sirvió en bandeja a la máxima autoridad judicial que podían encontrar.
El Jefe de Fiscales, Carlos Salinas, quien acaba de hacerse cargo de la investigación junto al sustituto a cargo de Delitos Complejos, Boga Doyhenard, desplazando al resto de los fiscales que investigaron el caso, había decidido tomarse un café en la vereda de Pizza Nova. La columna de manifestantes pasó por el lugar y lo identificaron.
Decenas de personas se abalanzaron sobre Salinas y lo golpearon con puños y patadas, hasta que dos personas pudieron rescatarlo y llevarlo –a la rastra- hasta una remisera ubicada a 20 metros. Mientras muchos descargaban la furia contra “la justicia”, unos pocos ya se dedicaron a pegarle a los demás comensales, romper vidrios y robar bebidas.
Salinas quedó refugiado en la remisera hasta que un par de patrulleros llegaron y lograron sacarlo en medio de la manifestación de unas 300 personas.
La columna siguió su marcha hasta la avenida, frente al Municipio, donde pasadas las 2 de la mañana quedaba poco más de un centenar de personas. Mientras tanto, en el barrio Ranqueles la situación parecía controlada por la policía, ya no había enfrentamientos, aunque todas las esquinas que rodeaban la zona caliente seguían custodiadas por pequeños grupos de jóvenes, con pilas de piedras a su lado.
Tirotearon a custodios de la casa donde fue encontrada Sofía
En las primeras horas de este miércoles, un grupo de desconocidos que la policía procura identificar inició un ataque a balazos contra los efectivos policiales que custodian la vivienda de los Janssen, en la calle 29 entre 40 y 42.