Varios centenares de jóvenes escogieron por blanco a los soldados de la ONU en el centro de Puerto Príncipe, la capital haitiana, lanzando piedras y levantando barricadas en oportunidad de una manifestación provocada por la epidemia de cólera, informó la AFP.
En el Campo de Marte, muy cerca del palacio presidencial se vivía una atmósfera de guerrilla urbana: se oían disparos de balas de fuego, aunque no se podía saber de donde procedían, mientras que los gases lacrimógenos volvían el aire irrespirable.
Neumáticos incendiados y tachos de basura bloqueaban varias esquinas de la capital donde nunca habían sido atacados los cascos azules despues del terremoto de enero.
Los jóvenes se enfrentaron a una decena de soldados de la Misión de las Naciones Unidas para la estabilización de Haití ( MINUSTAH) que se encontraban a bordo de una camioneta descubierta. Uno de los soldados, de los que apuntaban a los manifestantes sin lograr reducirlos, cayó del vehículo. Allí fue atacado a pedradas hasta que logró subir de nuevo a la camioneta. “El cólera eso es lo que nos ha traído la Minustah” o “Vayánse Minustah” gritaban en creol los manifestantes reunidos en un gran campo de refugiados del sismo que provocó más de 250.000 muertos.
“La Minustah desparrama excrementos en las calles” se podía leer en una pancarta, debido a los rumores, desmentidos por la ONU de que serían los cascos azules nepaleses los que habrían traído el cólera en la isla.
Los jóvenes que habían programado en un primer momento dirigirse a la sede de la Misión de la ONU, regresaban al centro de la capital buscando a las fuerzas del orden a las cuales apedrear.
La epidemia de cólera que acosa al país desde mediados de octubre, el más pobre del continente americano, ya ha provocado 1.100 muertos y atacado a 18.000 personas. La enfermedad ha cruzado esta semana las fronteras con un caso en la República Dominicana y otro en La Florida, al sureste de los EEUU “La manifestaciones son en contra del poder y de la Minustah que nada hace. La Minustah debería pacificar al país pero todo es peor donde está. “La Minustah mata a los haitianos”, asegura Ladiou Novembre un profesor de enseñanza secundaria de 38 años. “Los dirigentes haitianos han olvidado a la población” agrega Novembre a diez días de las elecciones legislativas y presidenciales del 28 de noviembre. “No hay infraestructuras, no hay educación, el cólera arrasa con el pueblo y el presidente no dice una palabra”
Traducido para Rebelión por Susana Merino