En la noche de los muertos,nuestra danza es vengativa…
El velo del olvido se corrió brevemente. Esa noche, como en tantas otras, los límites de lo prohibido y lo permitido se desvanecieron. Las ganas y el arrojo le ganaron al control y al miedo. Los corazones se aceleran, los estómagos se aprietan, y a través de dos hoyitos de mascaras veíamos cómo nos acercábamos a nuestro objetivo. Estaba todo listo, estaba todo dado. No llamábamos la atención de nadie en ese ambiente de idiotizado jolgorio.Nos impregnamos de esa importada estupidez mercantilizada, festiva y tétrica. Ustedes, el mercado, su cultura, nos brindaron una de las herramientas más preciadas: la invisibilidad. La carne se sintió viva nuevamente, y los muertos volvieron a salir a la calle. Vestidos de fantasma y calavera flotamos hasta aquel frontis. Sus ventanales no reflejaron sólo a los que materialmente estuvimos allí, nosotros logramos ver cientos de siluetas…eran nuestrxs compañerxs caídos en combate.
Halloween es una de las últimas imposiciones comerciales que llegaron a este territorio. Otra excusa para vender productos que las personas no necesitan en lo más mínimo, otra forma de normar un comportamiento social sin la necesidad de usar la fuerza, puesto que la necesidad ya fue creada: cada niño clama por participar de esta celebración del consumo. Pero esta burda fiesta tiene una connotación ancestral, y nosotrxs la dotamos de nuestro significado: lxs muertxs visitan a lxs vivxs para varias culturas,así es como esa noche cruzamos el límite del olvido y el silencio, para reencontrarnos con nuestrxs seres amadxs, nuestrxs compañerxs de acción volvieron a transitar por las calles de esta ciudad. Esa noche Aracely Romo, Pablo Vergara,Fernando Villalón, Claudio Paredes,Nelson Garrido, Mauricio Morales,Zoe, Jean Farid Chang nos acompañaron,con alegría nos relataron sus múltiples experiencias de lucha, nos ayudaron a ser cuidadosxs para no perecer ante un eventual descuido o manipulación del poder como a ellos les pasó, puesto que aún tenemos muchos motivos para propagar esta lucha y para continuar en vida esta venganza contra quienes les dieron muerte años atrás e intentaron dejarlxs sin voz.
Deambulamos juntxs hasta el frontis del Edificio Corporativo de COPESA, en el centro de Santiago, Cuartel de un selecto grupo de periodistas que ejecutan una importante tarea complementaria para el ejercicio del poder en Chile; en su autoproclamado rol de «generación de opinión pública» estos cómplices de la dominación despliegan su tarea fáctica, que no es otra que ejercer como la policía escrita que ha enfrentado a la rebeldía, persiguiendo, apuntando y allanando el camino para la identificación de los luchadores que armados en el coraje, la determinación y el arrojo, han volcado sus voluntades, prácticas y energías al desarrollo de una experiencia de lucha y ataque frontal al poder.
Con Dolor, pena, rabia e impotencia momentánea vimos, a través de sus páginas, cómo durante el año 2007, horas antes de la ofensiva policial, sin pruebas sustanciales expusieron la integridad de los compañeros Juan Aliste Vega, Marcelo Villarroel, Freddy Fuentevilla y Carlos Quiduleo, poniendo precio a sus cabezas y empujándolos a la fuga; vimos cómo el 2009 se deleitaron exponinedo el cuerpo aún humeante de Mauricio Morales, como buitres tras su presa; soportamos la sentencia anticipada del bullado «Caso Bombas», ante la evidente coordinación entre los empleados de este edificio y las policías, para lograr un clima social favorable a ese linchamiento público desde el 14 de agosto del 2010,donde también hubo espacio llevar la delantera en la persecución de lxs compañerxs fugadxs Diego Ríos y Gabriela Curilem. Y hace poco tiempo, en junio de este año, han rebrotado nuestras lágrimas ante las imágenes reiteradas expuestas por ustedes del accidente, dolor y agonía de Luciano Pitronello, a quien sentimos como parte nuestra sin siquiera conocerle, puesto que su arrojo y posterior accidente conforman la dialéctica del ataque. Con asco hemos visto en el último tiempo,cómo marcha tras marcha se han esforzado por grabar e identificar a todxs aquellxs que a rostro cubierto buscan ir más allá del reformismo estudiantil, forzando el enfrentamiento y multiplicando los ataques a la propiedad, a sus dueños y sus defensores pagados.’Buscaremos identificar y presentar ante la justicia a los criminales y violentistas’, no es más que el llamado abierto que los poderosos hacen a sus piquetes de periodistas y ciudadanxs delatores. En situaciones de agudizacion del conflicto social, es posible distinguir los posicionamientos reales de individuos y grupos; el de la prensa es claro: una suerte de vocería de los poderosos, ese lugar codo a codo que ocupan con las policías de choque, ese asiento que se les reserva en los carros policiales, ese escudo verde que los protege en las manifestaciones, ese rol de delatores que con gusto asumen, todo con tal de obtener pruebas suficientes para encarcelar a lxs rebeldes.
El alcance de nuestra acción trasciende a la ruptura de sus ventanales y busca ir más allá de los daños materiales producidos en el frontis de su edificio; la sensación de inseguridad que buscamos generar en ustedes como institución, y específicamente en su vanguardia policial: Andres López,O. Fernandez, Sebastián Labrín y el célebre testigo protegido Max Frick, ha sido la principal motivación que nos unió como grupo informal que se ha propuesto individualizar en estos periodistas la responsabilidad de cada uno en los hechos ya mencionados. Aténganse a las consecuencias.
La sencillez es nuestra mejor arma. La pólvora es tan simple de fabricar, que sólo necesitamos ingresar a locales comerciales y desembolsar muy poco dinero. Con menos de cinco mil pesos levantamos de su cama a Cristián Bofill (con su atuendo de ejecutivo ’sport’), director ejecutivo de COPESA, hicimos hablar al repugnante y acongojado Andrés Chadwick y al detestable, preocupado y víctima del bullyng politico, Rodrigo Hinzpeter (en su versión despeinado-dominical), y pusimos el grito en el cielo del gremio internacional del periodismo progresista, cómplice de la democracia.
Es esta misma sencillez lo que desmiente categóricamente esa figura penalizable, terrorífica, compleja y vertical con la que buscan imputarnos dentro de sus parametros legales.
Creemos y practicamos en el conjunto de nuestras vidas,la libre asociación, la afinidad y la destrucción de la autoridad. La mayor complejidad de nuestra acción jamás será la fabricación de pólvora negra casera, compuesta por carbón, azufre y salitre, tampoco es difícil conseguir un extintor para rellenar, en el colegio aprendimos a confeccionar sistemas electricos, y de muchos compañeros hemos recibido las recomendaciones básicas para no correr mayor peligro. La complejidad está representada por la planificación meticulosa y la generación de criterios de seguridad que apuntan a evitar a toda costa un posible daño a transeúntes (uno de los principales argumentos engañosos que quieren reproducir en la masa ciudadana).Los hechos hablan por sí solos: cientos de bombas y ningún heridx externo.
Por último, precisar que nuestra lucha no es terrorismo, imagen inventada por el poder para justificar sus arremetidas contra quienes buscan la libertad. Ellxs nos invocaron con su constante hostigamiento, pues bien, aquí estamos frente a ustedes,decididxs a defender a toda costa nuestros principios y prácticas. Son estas actitudes las que reconocemos en las diversas experiencias de lucha y enfrentamientos protagonizados por todas esas siluetas que esa noche nos acompañaron.
Que el respeto, fraternidad y la solidaridad trasciendan los discursos y se transformen en acciónes cotidianas. Tenemos compañerxs caídxs, compañerxs presxs y compañerxs fugadxs con quienes plasmar estos valores, y vaya para ellxs nuestras sonrisas cómplices y alegres.
NINGÚN GUERRERx ESTÁ SOLX
LIBERTAD A LXS PRISIONERXS DE LA GUERRA SOCIAL
A MULTIPLICAR LOS ATAQUES CONTRA LA AUTORIDAD
PD: Ahora nos toca reír a nosotrxs. Muestren las imágenes detalladas de la instalación del amigo Chancho Juanito, fiel ayudista de este Comando
Fantasmal. Muestren nuestra risa desenfrenada, la burla que les dedicamos en esos momentos. Muestrenlo una y otra vez, con el mismo ímpetu que suelen tener para denigrar nuestra lucha, con el mismo morbo
que han desarrollado por años. Muestren el miedo que sintieron, las horas que nos tuvieron que dedicar, el ridículo que su ilusión de la seguridad ciudadana hizo esa noche. ¡Muestrenlo!
http://www.youtube.com/embed/-ct–ImuMp0?hl=es&fs=1