FUENTE: Liberación Total
Muchxs de nosotrxs que hemos adoptado una postura firme en lo relacionado con la liberación animal, hemos sido abordadxs y preguntadxs en un momento u otro por otrxs autodenominadxs activistas sobre por que no gastamos más tiempo politiqueando y halagando a la gente. La idea más común es que si apelas a la conciencia de la gente en vez de a su indignación vas a ganar más adeptxs para “la causa”. Quizás puedas atraer más moscas con azúcar que con vinagre. Sin embargo, como en la mayoría de la ideología bienestarista, hay gran cantidad de simplificaciones e incongruencias a las que hacer frente.
En primer lugar, un gran número de personas apáticas no son una victoria para lxs animales. Prefiero tener a mi lado diez guerrxs veganxs que 100 ó 1000 comandos del teclado que a lo sumo van a una protesta y sujetan un cartel. Más importante aún, diez guerrerxs veganxs pueden lograr una enorme diferencia para lxs animales ahora.
Tengo el correo de activistas de todo el país. Veo los éxitos en los reportajes y media que me envían.
Y los éxitos son siempre los mismos. Protestan con pasión, presionan sobre lxs abusadorxs de cachorrxs para la vivisección, se niegan a ser intimidadxs por las autoridades, y, debido a su pasión y efectiva resistencia, los mass media empiezan a recoger las historias. Los negocios cierran o tienen que trasladar sus operaciones.
Esto es lo correcto. Es el camino correcto de la acción.
La idea de que las tácticas están bien o mal es un enfoque elitista y cobarde. Sólo los fines están bien o mal. Si gritando y protestando etorpecemos su trabajo entonces es correcto porque el objetivo final es ser eficaz contra el maltrato animal. Pero si tu objetivo final es que todo el mundo piense que eres una persona agradable los gritos y protestas agresivas son totalmente erróneas. Y esta es la línea entre lxs que realmente se preocupan, por encima de todo, y lxs que son simplemente pose, aunque con compasión.
Otra mentira es que “siendo agresivxs puedes poner a otrxs en contra de la causa”. La verdad es que los iguales se atraen. Si usted promueve la liberación animal con militancia y fanatismo, esa es la clase de persona que va a atraer. Y esto es lo que el autodenominado movimiento no clandestino necesita. Activistas moderadxs estan convirtiendo el veganismo en una moda y los derechos de lxs animales en una filosofía. Bueno, dietas e interesantes conversaciones no están salvando animales. Por el contrario, condenan a lxs animales morir por billones mientras lxs que dicen ser sus protectores juegan con las palabras y permanecen como “compañerxs pasivxs de viaje”.
Es hora de que este movimiento sea efectivo en vez de afectado. Estoy impresionado con la cantidad de personas que se identifican con el sufrimiento y como “lloran todo el tiempo por lxs animales”. Estoy impresionado por dos importantes razones.
Primero, como se sienta no afecta a que un animal sea condenado a muerte. Podría sentirse feliz y emocionado porque van a morir o triste hasta el punto de un colapso nevioso. De cualquier manera, sus sentimientos tiene nulo efecto sobre un/a animal enjauladx.
Segundo, dudo de la sinceridad de tales declaraciones cuando son hechas por aquellxs que no participan activamente en la lucha contra la explotación animal. Si te importa, ¡entonces actua!. Si oyes o eres testigo del abuso hacia lxs animales y tu reacción es llorar y lamentarse y continuar enterrando tu cabeza bajo la tierra, estás demasiadx influidx.
Mi consejo sería continuar viendo la sangre derramada y la explotación trabajando con tu ultra-sensibilidad hasta comenzar a enojarse respecto a esto.
Como he dicho antes, ¡la respuesta adecuada al mal es la indignación!. La razón de porque esta es una respuesta adecuada es porque la atrocidad estimula la resistencia psíquica; el sentimentalimos y la tolerancia no. En nuestro movimiento no clandestino (y por movimiento no clandestino me refiero encarnizadamente al movimiento legal por la liberación animal) el/la individux debe tomar la iniciativa. ¡El/la individux debe estar motivadx!. Porque, en última instancia, es la actividad la que te convierte en activista.
Navegar por internet y postear comentarios es sitios webs sobre derechos de lxs animales no es activismo. Pensar en los problemas y formular opiniones no es activismo. El verdadero activismo se asemeja a trabajar porque eso es lo que es la actividad. Tiempo, energia y sacrificio se suman a los resultados.
Si su idea de derechos animales es tener la naturaleza como hobby, por favor buscate otro hobby. Si tu idea de activismo es ser veganx y nada más, no te llames activista. Si bien es verdad que me alegro al escuchar que alguien se hace veganx, simplemente no participar en un mal no es lo mismo que oponerse acticvamente a él.
Cualquier forma de opresión o perversidad es tremendamente activa y trabaja duro para someter. La no participación no lo para igual que cualquier guerra no se para porque tu no te alistes en el ejército. Y esto ES una guerra (una guerra con más víctimas que cualquiera anterior a ella). ¿Cuántos millones de litros de sangre tienen que derramarse antes de actuar?. ¿Cuántas atrocidades más se tienen que producir sobre lxs más indefensxs de nosotrxs para que haya una sensación de urgencia aquí y ahora?. Al parecer para la mayoría, ninguna cantidad de sufrimiento demanda de acción, ninguna cantidad del sufrimiento de otrxs lo vale.
¿Qué es esta apatía compasiva, esta cuidada pereza?. Tiene tanto sentido como una “masacre humana”. Hago un llamamiento a estxs bienestaristas, hippies-críticxs porque están convirtiendo un movimiento de resistencia en un producto de consumo y en imagen, en una cáscara vacía. Yo también defiendo con fuerza la militancia y el activismo directo, ya que, durante décadas, hemos sido atacadxs por grupos e individuos demasiado numerosos como para nombrarlos aquí. Mientras que sigamos adelante, digamos la verdad, salvemos animales, y llevemos la lucha a las puertas de las oficinas, y a los bolsillos de lxs explotadores de animales y especuladorxs, no solo estamos frente al control de los mass media sino también a los que se adhieren a no hacer nada en nuestro propio “movimiento” que tratan de ocultar su propia inacción tirando abajo el duro trabajo y sacrificio de otrxs.
¡Termina con esto AHORA!
Solo hay un movimiento, ¡el que se mueve! ¿Quieres participar en él?. Entonces ponte en movimiento, apasionate, enfrentate, agita y educa. Estudia otros movimientos de justicia social que tenemos frente a nosotrxs y que han conseguido niveles de éxito que nosotrxs aun no hemos alcanzado. Grupos como lxs Black Panthers, John Africa’s MOVE!, American Indian Movement y lxs sufragistas emplearon tácticas ganadoras (tácticas de trabajo empleadas por cualquier grupo, sin importar la causa). Las palabras de Malcolm X, Screaming Wolf y Sitting Bull son atemporales estan esperando de nosotrxs ser redescubierta y aplicadas en las actuales luchas de liberación.
Es hora no solo de abrazar la “cultura de seguridad”, sino también de rechazar la “cultura de la paranoia”. El Movimiento por la Liberación Animal tiene mucho en común con muchas otras luchas pasadas y presentes. Me gustaría vernos unidxs en la lucha por la liberación total de la tierra, lxs animales y lxs humanxs… Pero antes de que seamos tomadxs en serio por lxs demas, tenemos que tomarnos en serio nosotrxs. Conocernos realmente. Y, hasta que dejemos de pedir limosna y comprensión como suplicantes, nunca alcanzaremos la parte guerrera que se necesita no sólo para ganar batallas y salvar a nuestrxs hermanxs animales, sino también para alcanzar un estado verdaderamente revolucionario, porque un cambio tan radical como la liberación de lxs esclavxs solo se produce con fuerza de voluntad.
Aquellxs que se benefician de la esclavitud y la muerte solo se detienen cuando se les hace detenerse. Y asi, es hora de que nostrxs dibujemos esa línea entre nosotrxs, una línea entre lxs que ven esta porquería gore y quieren terminar con ella ahora, por cualquier medio necesario, y lxs que quieren verse bien y no hacer nada.
Puedes ser parte de la solución o del problema.
Liberación Animal. Cueste lo que cueste!
Walter Bond, corresponsal de la Sala de Prensa de Liberación Animal de América del Norte, Prisionero de guerra.
Sitio en apoyo a Walter en ingles: www.SupportWalter.org