Fuente: Colectivo Caracol.
Hoy 16 de febrero del 2011 una vez mas volvimos a ver y vivir un desalojo. Esta vez el bario San Martin de esta capital cordobesa fue testigo del desalojo del centro social y cultural Kasa Lxs Gatxs, recuperado hace 9 años en el marco de la rebelión popular del 19 y 20 de diciembre del 2001.
A las 9 de la mañana comenzó el amedrentador despliegue, un operativo plagado de irregularidades que conto con la presencia de personal de la fiscalía de turno junto a una gran presencia policial uniformada y de civil, la división canes y la guardia de infantería.
El fuerte operativo montado duro menos de 4 hs. Sin siquiera alcanzar a sacar la totalidad del mobiliario y las herramientas colectivas por parte de lxs desalojadxs.
Kasa Lxs Gatxs surgió por necesidad de vivienda y de abrir nuevos espacios para la organización popular.
Estas son iniciativas de jóvenes que necesitamos darnos un lugar en esta sociedad que nos excluye y que nos ofrece como proyecto de vida la precariedad, marginación, egoísmo, competencia, represión y pasta base (“paco”).
Este fue un espacio caracterizado por la búsqueda de salidas colectivas, bajo los principios de la autogestión, la horizontalidad y la autonomía de instituciones burocráticas, partidarias y mercantilistas. Independientemente de iglesias, estado o sectores del poder.
Un cumulo de voluntades y energías resistentes a las lógicas hegemónicas del poder, que tanto nos alienan y nos convierten en consumidorxs pasivxs.
Aquella a quien el estado reconoce como propietaria, la abogada Paneta, fue funcionaria publica del ministerio de hacienda durante el nefasto gobierno de Cesar Angeloz, caracterizado por la desenmascarada corrupción y la gran cantidad de medidas anti populares.
Dicha persona desde este lugar de privilegio se adueño de este espacio, como de tantos otros. Con turbias estrategias sin jamás habitarlo, usarlo o proyectarse en el, mas allá de la especulación inmobiliaria.
En ese sentido nos gustaría aclarar que no vemos que un desalojo llevado adelante siguiendo tales o cuales normativas y procedimientos legales sea una mera aplicación técnica de las leyes que rigen sobre nuestras vidas, sino que esas leyes son parte de un claro proyecto político. Proyecto que pone custodia del estado a la especulación inmobiliaria, por encima de cualquier necesidad e iniciativa creativa de la juventud que busca organizarse para proyectarse generando otra escuela de vida que nos permita aunque sea de a poco, materializar una forma de existir donde la igualdad destituya al privilegio. Donde podamos deconstruir esta formación absorbida para reproducir poder en cada acto cotidiano. Corroer culturalmente al sistema de privilegio de aquellxs que se están quedando con lo que es de todxs.
Queda demostrado que ante semejante atropello de lxs de arriba, las herramientas mas solidas con las que cuenta el pueblo para recuperar lo que le pertenece son la organización y la acción directa.
No es nuevo para nadie tanto terror estatal montado para garantizar la acumulación de bienes en pocas manos. Tampoco es nuevo que tenemos la vida mas que precarizada.
Recientemente se veía a lo largo y ancho del país como miles de compañerxs se movilizaban ocupando tierras e inmuebles y padecimos el saldo de la respuesta que dan los gobiernos: balas, palos y mas balas. Con caidxs en Soldati, la comunidad originaria Qom. A días de haber caído un joven militante de 23 años en manos de la burocracia sindical mientras la policía le liberaba la zona para que actúen sus patotas. Y días después adolescentes que juntaban autopartes para cambiar por comida de un tren que se había descarrilado también eran fusilados. Así sucede en el campo como en las ciudades. En toda Latinoamérica.
Hoy la indignación nos atraviesa, entendemos que lo peor que podríamos hacer es quedarnos en silencio o desentendernos. Transformaremos la indignación en grito. La solidaridad fue y es una de las mejores armas de las que disponemos como pueblo.
La dignidad no se mendiga se arrebata, es lo que nos va quedando en claro de las luchas que libramos.
Mientras exista un orden y un progreso para pocxs , resistiremos cada vez mas organizadxs y con mas fuerza.
Lxs poderosxs no podrán parar nuestra sed de cambio social. Nuestra necesidad de sentar bases de otra sociedad posible, que ya hemos empezado a construir, y la seguiremos construyendo.
¡Un desalojo Otra ocupación!!!!
COLECTIVO CARACOL, Córdoba.