Ayer domingo, pasadas las 11 de la noche, tras los conciertos y la cena autogestionada que había tenido lugar en el nuevo gaztetxe okupado en el barrio de Errotxapea, un dispositivo de alrededor de 100 policías, entre antidisturbios de la policía española y de la policía municipal, accedieron al edificio por el tejado y por la puerta principal para desalojarlo.
En el interior había alrededor de unas 40 personas, ya que a esa hora era la asamblea. Al requerirles una orden judicial para el desalojo la policía respondió con amenazas y hizo oídos sordos al requerimiento de los ocupantes. Después procedieron a cachear, identificar y fotografiar a toda la gente, entre insultos y golpes a algunas de las personas. No se han realizado detenciones, han requisado los teléfonos a la mayoría de la gente y poco a poco los ocupantes han ido saliendo tras ser identificados.
El movimiento de okupación de Iruña ha convocado para hoy, lunes 31, una concentración a las 19:00 en la plaza del ayuntamiento en repulsa a este ilegal desalojo y en defensa de los espacios okupados.
Comunicado tras la okupación:
Como tú, vivimos (o lo intentamos) en esta ciudad, en este barrio. Nos conoces porque has sentido lo mismo que nosotras. Como tú, hacemos malabarismos entre la precariedad y el paro. Nos conoces porque has sentido la misma rabia al ver a los gestores de la miseria y el sufrimiento pactar para obligarnos a trabajar aún más, para arrojarnos a las garras de bancos y fondos de pensiones privados. Les has visto repartirse el dinero, los beneficios que sacan de tu trabajo y de tu vida. Como tú, hemos sentido la impotencia en la que nos han sumido después de años de ataques capitalistas a la solidaridad y los bienes comunes.
¡Pero ya no más! Nosotras hemos decidido recuperar lo que es nuestro, del común. Hemos estado en todas las huelgas, estuvimos contigo el jueves, y hoy hemos abierto en este barrio un local abandonado para que sea tu centro social, tu gaztetxe, tu espacio de debate, donde podamos poner en práctica nuestras ideas y nuestros deseos
Hoy hemos convertido nuestro malestar en alegría, en la alegría que da el construir de forma colectiva nuevas posibilidades de vida alejadas del capitalismo. Queremos una vida mejor, una vida que no es la del consumismo, que no es la del miedo, que no es la de sus normas sexuales, que no es la de su cultura de élites, que no es la de la pasividad. Tenemos, tienes, todas las herramientas en tus manos. Pongámoslas a trabajar en común y nuestra capacidad de construir una ciudad, un mundo nuevo será mayor.
Es necesario comenzar a imaginar una ciudad y una sociedad más allá del capitalismo… y eso no se va a dar desde las reformas estatales, sino desde la construcción en común, el apoyo mutuo, la solidaridad, la defensa de los bienes comunes, la creación de espacios liberados…