El 21 de julio a la 1 hrs. un individuo accede al cajero automático del Banco Nación de la República Argentina ubicado en la calle Adolfo Alsina y San José en el centro de Buenos Aires, esparce gasolina en el recinto y deja un artefacto incendiario con un retardo de cinco minutos.
Ataque directo a la propiedad, atentado contra la autoridad, destrucción del Estado-Capital, ningún dialogo con el Poder, no hay tregua, la guerra social es ahora.
La normalidad del ambiente nos intenta contener e inmovilizar, amedrentar con el castigo de la justicia y el control de la seguridad tecnológica. Podemos pensar y criticar todo cuanto queramos sentados frente a seres que confían y esperan la revolución social, también por optar organizar un acto de sabotaje que subvierta el orden impuesto por la fuerza de la autoridad.
El capitalismo se manifiesta desde el trabajo, pasando por el dinero y llegando al consumo; el Estado se manifiesta desde la cotidianeidad de nuestra familia, pasando por las relaciones sociales y llegando a la obediencia, la aceptación y la adaptación social.
La ruptura total con los valores dominantes apunta a liberación total del mundo, puede ser un establecimiento público o privado que da vida al sistema, pude ser una mercancía o un instrumento de poder y opresión, puede ser una propiedad privada.
El nacionalismo ha sido atacado en esta ocasión, la estructura coercitiva también. No digan que somos pocos, simplemente digan que estamos. En Italia compas represaliadxs por el Estado, y siguen sucediéndose los actos ofensivos por la libertad; en Grecia la lucha continua; en Chile, en México, compas insurrectxs dejan claras muestras del espíritu rebelde que lxs mueve a destruir la construcción de este mundo autoritario que avanza por sobre todo.
Y en todas partes del mundo la nueva Anarquía de praxis hace eco de sus acciones porque el mundo nuevo que lxs anarquistas llevamos en nuestros corazones no puede esperar demasiado tiempo analizándose con palabras.
También nos responsabilizamos por el ataque incendiario a un coche de la Empresa de seguridad “Prosegur” en el pasaje Laplace y Campana (Villa del Parque); y por la quema de cinco autos de alta gama: un automóvil en Larrea y Paraguay (Recoleta), una camioneta en Gral. Rivas y Condarco (Villa del Parque), una automóvil en Tinogasta y Allende (Villa devoto), un automóvil en Lavallol y Nueva York (Villa Devoto), y una camioneta en Nazarre y Bahía Blanca (Villa Devoto).
Amigxs de la Tierra – Federación Anarquista Informal.